
Este evento que reunió a 240 fotógrafos, desde los días 17 a 20 de octubre, fue algo que sólo los que han acudido alguna vez a esta cita pueden entender y sólo los que nos gusta la fotografía podemos aguantar el ritmo vertiginoso impuesto por Gervasio.
Todo lo que he aprendido, toda la gente encantadora que he conocido y todo lo que mi mente se ha abierto a nuevos caminos, gracias a La Fundación Santa María de Albarracín, que con su buen hacer ha conseguido que todos estuviesemos encantados y felices.